jueves, 30 de diciembre de 2010

La vida arrancó otra vez...

Vista al Paseo Bulnes -  Santiago, Agosto de 2010

Miren la inmensa quietura...
Pereciera que hasta el esquelético árbol del paseo Bulnes 
detuvo su balanceo apesumbrado 
para posar al congelado de mi estenopéica caja.
Y la vida se arrancó de nuevo,
no quiso detenerse un momento y no dejó que la fotografiara.
Hasta el mismo árbol de huesos finos
impide imaginarlo de verdes y pequeñas hojas
con ese leve movimiento provocado por el viento...

¿Tan rápido avanza la vida hoy en día
que ni una foto siquiera
la puede congelar?


Furhentiox

No hay comentarios:

Publicar un comentario